Hacer gelatina parece una tarea simple. Solo disolver el polvito en agua caliente y dejar en el refri, para que despues ¡taraàan!, como por arte de magia pasen de un aguado estado a un tembloroso sòlido. Pero, ¿que pasa si a pesar de seguir las instrucciones de la cajita no salen?...pues quedan en un estado sin denominaciòn, entre liquidas y con coagulos, nada agradable, ni siquiera sirven para jelly shoots.
Algunos expertos en gelatinas afirman que la pràctica es lo que les ha dado su maestrìa; otros, amateurs intentan una y otra vez, echando a perder cajitas de polvo; y una parte de la poblaciòn prefiere no involucrarse con la preparaciòn de ese postre.
Yo era de las que en un principio queria prepararlas, despues nunca cuajaron, entonces me hice a la idea de que nunca me saldrian, asi que abandonè la idea de hacer mi especialidad en gelatina.
Hoy, despues de muchos años, he tomado una cajita de polvo rosa.
Comencè analizandola, despuès con mucha paciencia y un poco de recelo recolectè todos los ingredientes. Puse a calentar el agua, eche el polvito, cubriendome la cara, por temor a que eso estallara violentamente.
Despues la puse cuidadosamente en un ridiculo molde de corazòn y la metì al refri. Creo que todo va bien, espero que cuaje a la perfeccion, tenga un sabor dulce y no me de malas sorpresas.
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